Introducción

Las tarimas de exterior son una excelente opción para embellecer y aprovechar los espacios al aire libre. Sin embargo, durante el invierno, conviene tomar ciertas precauciones para protegerlas y prolongar su vida útil. En este artículo te presentamos algunos consejos para lograrlo.

Cómo proteger tus tarimas de exterior en invierno

Lo primero que debes hacer es limpiar bien la superficie. Retira el polvo, la suciedad y las hojas secas con una escoba o un aspirador. Si hay manchas difíciles, puedes usar un limpiador especial para tarimas de exterior.

A continuación, aplica un protector adecuado para el tipo de madera que tenga tu tarima. Asegúrate de que esté seca antes de hacerlo. Si es posible, elige un día sin lluvia ni humedad para que el producto penetre bien en la madera. Deja secar el tiempo recomendado y aplica una segunda capa si es necesario.

Si vives en una zona con inviernos muy fríos, considera colocar una cubierta sobre la tarima. Esto evitará que la nieve y el hielo se acumulen sobre ella y la protegerá de la exposición directa al clima extremo. Hay diferentes opciones de cubiertas, desde lonas hasta estructuras fijas, según tus necesidades y presupuesto.

Por último, evita el contacto directo con objetos de metal, ya que pueden causar daños y manchas en la madera.

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En Habitissimo, puedes encontrar profesionales especializados en la instalación y el mantenimiento de tarimas de exterior. A través de la plataforma, puedes comparar presupuestos y elegir el que mejor se adapte a tus necesidades. Además, en la sección de consejos y guías de su sitio web, encontrarás más información sobre cómo cuidar y mantener este tipo de superficies. Para más información, visita su sitio web.

Conclusión

Proteger tus tarimas de exterior durante el invierno no requiere mucho trabajo, pero sí es fundamental para mantenerlas en buen estado y disfrutar de su belleza por más tiempo. Sigue los consejos que te hemos proporcionado y no dudes en contar con la ayuda de profesionales cuando sea necesario.